Nos merecemos los gobernantes. Si revisamos la elección popular de alcaldes en Pereira, encontramos la elección, esencialmente, de politiqueros. Hemos elegido corruptos, mediocres, mediocres/corruptos, corruptos/mediocres. Pocos aciertos. Tras ver como colombialider.org evaluó más de 90 indicadores y lo premió como el mejor alcalde de ciudades similares a la nuestra, podemos decir que con Carlos Alberto Maya López acertamos. Ahí están las cifras ([i]).

Para analizar éstos 4 años, se debe partir de que Maya no es «un político». Pues joven entendió que era más de estado que de gobierno, más técnico -financiero- que político/politiquero, entonces gobernó desde la técnica, no desde lo populachero, se dedicó a direccionar la ciudad, en medio de los peores momentos para un alcalde en décadas: La primera pandemia, de la que se olvida, su gobierno logró que fuéramos la primera ciudad de más de 100 mil habitantes con inmunidad de rebaño ([ii]). El primer paro nacional, donde su gobierno consiguió ser la única ciudad que firmó un pacto para levantarlo ([iii]): eso también se olvidó. Es decir, en las dos grandes crisis fuimos modelo nacional. Es falso que se concentró sólo en obras físicas. Ni el exitoso manejo de la pandemia, ni del paro lo son. Se centró en obras porque coincide con la ONU en que uno de los factores esenciales para reducir la pobreza y la miseria es generar empleo ([iv]), y para ello es clave mover la construcción. Así logró llevar a la ciudad a los menores índices de desempleo en décadas ([v]): ¿amnesia colectiva?

Si «hizo la tarea» ¿Cómo se explica el 49% de imagen desfavorable, o, que sólo el 33% tenga una percepción en «amarillo» o en «verde» de su gestión?: ¡sencillo! ¡su gestión real NO importa! lo que importa es que Maya No sonríe, No finge, No anda dando «picos y abrazos», Ahh… y, entre otras, que muchos venían de la irresponsable comodidad de NO pagar valorización, y esta alcaldía les hizo una actualización catastral aplazada hacía mucho: ¡Definitivamente Maya es un «mal político»! ¡Cobra impuestos!

Tuvo errores ¿y quién no? Uno: nunca priorizó COMUNICAR PERSONALMENTE: ¿usted observó muchas fiestas por hacer obras, calles? ¿plaquita, inauguración bullosa? ¿a otros sí los ha visto cierto? Esa modestia -así como se oye- luego la usaron en su contra, empero, algunos entendieron que fue mucho mejor alcalde que sus antecesores (…) Otro, el de todos los alcaldes recientes: CARECER de un GIGANTESCO programa social, ejemplo, el de las miles de becas integrales para jóvenes universitarios de Claudia López en Bogotá (marcó el triple de favorabilidad…). Sigo: Ahorrarse el uso a fondo del «garrote» para recuperar la Calle 19 vuelta hoy un parqueadero sobre andenes… y hay más. Que dejó obras inconclusas ¿y qué alcalde reciente no las ha dejado? ¡TODOS! ¡los que siguen las terminan! ¡4 años no alcanzan! ¡Menos con Pandemias, Paros Nacionales y olas invernales!

Como todo ser humano tiene sus defectos. Pero uno de los que carece es el de la deshonestidad, el de la corrupción: Casi todas sus obras fueron por «pliego tipo», en ello también fue modelo nacional. Ese es el dato más importante de su administración: En las mediciones de Colombia Compra Eficiente ([vi]), ocupó en 2020 el 4o lugar, en 2021 el 5o y en 2022 el 2o lugar, entre las ciudades con mayor pluralidad de oferentes ¡transparencia en contratación! Pero «Ninguna buena acción queda sin castigo» (…) así fue como ganaron incompetentes como los contratistas del alumbrado navideño ¡año tras año ni uno acertó! o los de la Avenida Colibríes 🤬… En fin, es un precio a pagar, en medio del desastre que vivimos donde, lo único que hace rato diferencia a los gobernantes, no es su supuesta ideología, ni la careta que se pongan, sino, si es honesto o deshonesto (…) Veremos qué sigue: «para las verdades el tiempo»

SUERTE, MUCHA, EN EL 2024, GRACIAS QUERIDO(A) LECTOR(A) POR ESTAR AHÍ

Columna final del 2023, publicada en varios medios

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